La marea sube durante semana santa.

Es bueno ver como poco a poco la situación que vivimos post covid va mejorando considerablemente y más en lugares van reactivando su turismo, como es el caso de Acapulco. Durante la primera Semana Santa se vio un gran flujo constante dentro del turismo, a comparación del año pasado, que según cifras oficiales del Ayuntamiento de Acapulco se alcanzó un 70.8% de ocupación de hotelera.

Se estima que a finales de este año esta cifra sea rebasada por mucho, porque como se mencionó al principio, la situación ha mejorado debido a que las playas del centro acapulqueño estaban repletas de turistas y no solo las playas centrales tenían esta acumulación de gente, sino que también las playas de la Zona Diamante como lo son: el Revolcadero, Bonfil y Majahua.

Si bien esta situación es más que perfecta para el turismo Acapulqueño, también es un peligro constante, como si fuera alguna bomba con contador, porque debido a estas conglomeraciones tan grandes de personas reunidas en mismo espacio en el cual el uso del cubrebocas es escaso por no decir inexistente hace que los casos de contagios por coronavirus aumenten exponencialmente. Por ello, existe la posibilidad de regresar a semáforo amarillo.

No está mal querer salir de vacaciones y distraerte de tu vida diaria, sin embargo debemos de tomar en cuenta el hecho de que aún existe la posibilidad de ser contagiado y que no podemos andar libremente sin cubrebocas alrededor de muchas personas que son ajenas a nosotros, tenemos que cuidarnos y ser responsables con el cuidado de nuestra salud y de los que nos rodean, así que en conclusión sí podemos disfrutar de unas buenas vacaciones, sin embargo, no omitas el hecho de cuidarte y tomar tus precauciones.