¿Esto es porno?

Cuando llegamos a la adolescencia, es normal escuchar de la pornografía y también es normal el tener la curiosidad o la inquietud de ver estos videos o fotografías de los que están hablando.

Los videos de las páginas porno han logrado que la sociedad que los consume crea en una realidad en la cual el sexo y todo lo que conlleva intimar con una persona es totalmente ficticia. Al ser actuados, existe una exageración tanto de sonidos como de gestos y sobre todo un trato erróneo hacia las mujeres por priorizar el placer del hombre.

Está comprobado que el ver videos porno, trastorna la sexualidad en objetificar a las mujeres y a crear falsas expectativas.

La industria de la pornografía, como todas las demás industrias, su única prioridad es el dinero. El gran problema es que obtienen sus ganancias de videos que llegan a ser violaciones, nudes o simplemente contenido sexista. Lo peor de todo es que sacan provecho de la violencia y el trauma de los demás.

Muchas actrices porno tienen el control total del contenido que están creando en estas páginas, pero muchas veces fueron introducidas sin su consentimiento a la industria y sus videos todavía siguen siendo virales.

Un caso muy famoso es el de Mia Khalifa. Ella fue una actriz porno por aproximadamente 3 meses en los cuales filmó 12 películas y pese a haber renunciado, sus videos siguen siendo de los más vistos en la página PornHub. Ella le pidió a la compañía borrar los videos en los que participaba, pero ellos se negaron. Por más que haya firmado un contrato, es su cuerpo y es su imagen por lo que ella puede decidir el que sus videos ya no estén en internet.

Ser una actriz porno no tiene nada de malo, lo pésimo es que los sitios como PornHub o YouPorn tienen la posibilidad de descargar los videos y esto permite que los consumidores puedan guardar y compartir en otras plataformas estos videos.